
Enorme juegazo con una conversión muy buena y con una interesante historia detrás... Lo más impresionante es que la conversión se hizo en tan sólo 6 semanas. El autor fué Manfred Trenz, un programador que era fanático del juego de recreativas y decidió hacer por su cuenta un juego muy muy inspirado en él, el famoso Katakis (otro gran juegazo de naves del Commodore). Parece ser que a Activision, la que iba a ser la responsable de la conversión del famoso juego, no le hizo ninguna gracia que Manfred sacara antes que ellos un juego muy parecido y además mejor que la versión que ellos estaban desarrollando, así que 'le ofrecieron amablemente' que hiciera la conversión él o lo crujían en los juzgados acusándolo de plagio. Así que el bueno de Manfred, ni corto ni perezoso, usó el motor de su juego Katakis para la conversión y gracias a ello la de Commodore es una de las mejores versiones del juego en ordenadores domésticos.
Manfred también es el autor nada menos que de la saga Turrican y The Great Giana Sisters, entre otros famosos juegos de la época.